José Luis Cordeiro
Los estudios del futuro son una disciplina que se ha popularizado desde sus comienzos formales después de la Segunda Guerra Mundial, cuando también se desarrollaron diferentes tipos de escenarios para visualizar posibilidades a mediano y largo plazo. Durante las décadas de 1950 y 1960, Herman Kahn y otros promovieron la prospectiva y estudios de futuro en Estados Unidos, al igual que europeos como Robert Jungk en Austria y Bertrand de Jouvenel en Francia. Luego nacieron organizaciones como el Club de Roma y la Sociedad Mundial del Futuro que ayudaron a posicionar el pensamiento a largo plazo. A finales del siglo XX y comienzos del siglo XXI han aparecido muchos grupos más como los transhumanistas, inmortalistas, singularitarianos y otros dedicados al estudio de las tecnologías exponenciales y la aceleración del cambio.
En mi nuevo bestseller “La muerte de la muerte” explico la posibilidad científica de la inmortalidad física y su defensa moral. Gracias a los impresionantes avances tecnológicos de los últimos años, hoy sabemos que el envejecimiento es una enfermedad, pero es una enfermedad curable, que esperamos curar y revertir durante las próximas dos décadas, antes del año 2045. Con mis amigos Aubrey de Grey y Ray Kurzweil, entre otros científicos con nuevas visiones sobre el envejecimiento, explico como estamos entre la última generación mortal y la primera generación inmortal.
Hoy sabemos que hay células inmortales (como las células germinales y las células cancerígenas) y también organismos inmortales (como las hidras y algunas medusas). La prueba de que la inmortalidad es posible es que ya existe, y ahora tratamos de entender cómo es que algunas células y organismos son biológicamente inmortales. Antes también era imposible volar, hasta que volamos. Además era impensable ir a la Luna, hasta que comenzó la carrera espacial. De hecho, muchas cosas se consideran imposibles, hasta que se vuelven posibles.
Sobre el viejo sueño de la inmortalidad, ahora sabemos que es científicamente posible, y pronto la muerte será opcional.
José Luis Cordeiro
www.Cordeiro.org
